domingo, 20 de enero de 2013

El Trabajador

Trabajo, ese oscuro objeto de deseo.

Siempre me ha parecido triste, pero mas aún ahora si cabe, el tener que estar contento por tener trabajo. Entendiendo aquí trabajo como eso que hacemos por obligación y solo a cambio de dinero a pesar de sentirnos la mayor parte de las veces explotados.

Es de este por supuesto del trabajo que hablo y no del que dignifica y realiza al hombre como persona, donde además de una compensación económica que le permita vivir, le da también otro tipo de satisfacciones (coincidiendo en este caso con algo para lo que esta preparado y le gusta hacer).



Pues el otro día pensando (exagerando un poco y dejando volar la imaginación) se me ocurría que "el trabajador" podía ser una especie en extinción, por otra parte algo totalmente imposible, a ver de que sino iban a vivir todos esos que no dan ni golpe y que "sin saber muy bien porque" están forrados de pasta.

La cosa no iba mas allá de buscar un tema para fotografiar, algo que en un principio para mi pueda resultar interesante y que si es posible tenga también un cierto atractivo para los demás.
Casualidad? no lo se, al poco me encontre con la posibilidad de hacer estas fotos.








Como casi siempre en la fotografía, el simple hecho de buscar un tema o hacer una foto ya te da pie sin querer a una pequeña reflexión. :)

2 comentarios:

  1. El trabajo entendido como la capacidad de crear o transformar cosas es un privilegio de nosotros la clase trabajadora. Las otras clases, las altas, solo existen para apropiarse de la riqueza que generamos los trabajadores.

    Me gusta mucho el articulo y la reflexion que te has currado :-)

    ResponderEliminar
  2. No me gusta mucho reflexionar sobre "el trabajo" porque tengo la sensación de que nos encontramos en este momento y sobre este asunto en una encrucijada. Uno de los caminos parece duro e incierto pero podría tener algo de futuro. El otro, aparentemente más fácil, tiene todo el aspecto de que conduce al desastre.
    A pesar de lo dicho, o precisamente por lo dicho, me gusta el artículo.

    ResponderEliminar