El otro día Bilbao retrocedió en el tiempo con un desfile que va ya por su cuarta edición y nos sitúa a principios de 1900, época de esplendor económico, cultural y artístico que a principios del siglo XX marcó el desarrollo del ensanche de la capital Bizkaína.
A las 12:00 se reunían en la Plaza de Santiago y como podéis imaginar no solo estaba atiborrado de público en general, si no que también estábamos un buen número de gente con cámaras, tablets, móviles, etc.. algo por una parte normal, pero que no se si por el desconcierto o por el batiburrillo montado, llamó bastante mi atención.
Con tanto revuelo no era fácil obtener imágenes donde no se colase algún elemento o "personaje" fuera de época, por no hablar de la plaza (mitad al sol, mitad a la sombra).
Planos cortos, cerrados y tirando hacia aperturas grandes, buscando el desenfoque, pero a la vez intentando no perder el contexto. Cuando no quedaba otra, contrapicados evitando el sol.
Me encantan este tipo de fotos como las de la "película", todo lo que suene añejo me gusta (será que me hago mayor ajajaj). La gente muy amable, dispuesta a posar y ser retratada. Yo en cambio prefiero pillar a la gente desprevenida, la diferencia puede estar entre documentar un evento o dar la sensación de que son fotos de la época.
Hace tiempo me hubiese llevado el tele, aquí por la proximidad de la gente no me hubiese servido de mucho, salvo hacer fotos parecidas desde mas lejos. Digo parecidas, porque aunque hubiesen sido retratos mas definidos, serían solo eso, retratos aislados sin contexto y se habría perdido la proximidad, la sensación de estar viviendo el momento.
Después de la congregación aquí en la Plaza de la catedral, el desfile fue hasta el edificio de la Diputación en la Plaza Moyúa, yo eso ya me lo perdí, quizás para otro año. ;-)
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